jueves, 15 de agosto de 2013

Que la muerte no diga la última palabra.

No hay muchos libros sobre maestros, aunque sí sobre nuestra Guerra Civil. Jaume Cabré, del que ya recomendamos su último libro Yo confieso, escribió en 2004 una bellísima y triste historia sobre el maestro de un pequeño pueblo leridense durante la posguerra. Será otra maestra, sesenta años más tarde, quien, gracias a unos cuadernos que aparecen tras la pizarra de la escuela que van a derribar, descubra la verdad de lo que pasó en aquel pueblo perdido. Las voces del Pamano no es sólo una historia del dolor que se vivió en los núcleos de población más pequeños, es también una llamada de atención sobre las verdades y las mentiras que se produjeron y se siguen produciendo. Nuestro protagonista, como todos los héroes, es un ser normal, asustadizo y temeroso que se deja llevar, escuchando lo que le interesa y viendo sólo lo que le presentan. Sin embargo, también como los héroes, sin motivo ni intensión se ve arrastrado contra su voluntad a acciones arriesgadas, y las asume como obligaciones del destino. Cabré nos va presentando al protagonista conforme la vida le golpea, los sueños se le rompen y el amor todo lo enreda. Paralelamente, y ya en nuestros días, la maestra, segunda protagonista, también tiene que enfrentarse a la vida, que no es sino engaño, desilusión y dolor, pero será superior su empeño por alcanzar y mostrar la verdad sobre alguien que ya murió y sobre el que nadie quiere indagar. Junto a ellos múltiples personajes inolvidables, el alcalde falangista, la señora del pueblo, la esposa, el hijo desconocido, el abogado, el chófer, monseñor, el maquis, los represaliados, el marmolista y su hijo, todos cumpliendo su función que no es otra que contribuir al enriquecimiento de una historia imprescindible. Serrallac, el hijo del marmolista que grabó la lápida del maestro, le pregunta a Tina, la maestra actual, por su empeño en que se conozca la verdad al cabo de tanto tiempo, y ella le responde: "No sé. A lo mejor para que no sea la muerte quien diga la última palabra".


(Jaume Cabré, Las voces del Pamano, traducción Concha Cardeñoso, Barcelona, Destino, 2012)

No hay comentarios:

Publicar un comentario