domingo, 8 de diciembre de 2013

Una selección de Louis Combet

En 1967 poco después de publicar el monumental Vocabulario de refranes y frases proverbiales de Gonzalo Correas, el francés Louis Combet da a la imprenta una selección de refranes castellanos con su correspondencia al francés bajo el título Español idiomático: refranes españoles. Publicado como complemento al estudio de nuestro idioma en el país vecino, Combet nos ofrece una muy buena muestra de nuestros proverbios, consiguiendo una visión bastante global del ideario que queda recogido en nuestro refranero. Sólo por el hecho de provenir de unos de los mejores hispanistas, al que debemos la edición más completa del refranero de Correas, debemos considerar este pequeño libro como imprescindible en el acercamiento al mundo proverbial castellano. Organizado alfabéticamente siguiendo palabras clave nos presenta el refrán castellano y a continuación su explicación, si fuera necesaria, y correspondencia con el refranero francés. El maestro Combet nos dejó en 2004 pero su obra paremiológica es y será siempre imprescindible para quien quiera conocer los refranes castellanos. Va esta pequeña muestra como homenaje a su labor.

Cuando el abad está contento, está todo el convento.

Aunque todo sea barro, no es lo mismo la tinaja que el jarro.

Casar, casar, suena bien y sabe mal.

Los diezmos de Dios, de tres blancas sisar las dos.

Dormir y guardar las eras, no hay manera.

El fraile que pide pan, carne toma si se la dan.

Gota a gota, la mar se agota.

A toda hora, el perro mea y la mujer llora.

Juanica la pelotera, casarás y amansarás y andarás queda.

Todos somos locos los unos de los otros.

No hay peor mancilla que muchas manos a una escudilla.

Si el necio no fuese al mercado, no se compraría lo malo.

Pedro, por ti poco medro. -Menos medrarás si yo puedo.


(Louis Combet, Español idiomático: refranes españoles, Toulouse, Privat, 1967)

Aforismos de Jardiel Poncela

No es muy conocida la faceta de Enrique Jardiel Poncela (1901-1952) como aforista. En 1937 publicó Máximas, mínimas. 535 aforismos sobre temas que, por no ser de actualidad, están siempre de actualidad. Algunos de los temas son, por supuesto, aquellos que siempre han aparecido dentro de los libros del género: el amor, la vida, la muerte, la mujer, la inteligencia, el pudor, la política, la amistad o la vejez. Y como es de esperar siempre desde el tono más humorístico y paradójico posible. En este sentido sigue una de las bases del género, la sorpresa, la imagen arriesgada, a veces, la banalidad. Un género tan aparentemente serio no deja de sorprendernos con opiniones donde la seriedad no es obligada y donde la ocurrencia trasciende lo inmediato. Muchas de las máximas de Jardiel Poncela posiblemente no hayan envejecido bien, muestran en muchos casos una visión en exceso machista y conservadora, pero siempre se disfruta cuando consigue arrancarnos al menos una sonrisa. Espero que esta selección sea una buena muestra.

El amor es como una goma elástica que dos seres mantuvieran tirante sujetándola con los dientes; un día uno de los que tiraban se cansa, suelta y la goma le da al otro en las narices.

En amor lo de menos es los insultos; lo  grave es cuando empiezan los bostezos.

Un solo amor es siempre demasiado.

Para encontrarle gusto a la vida no hay nada como morirse.

Los Papas mueren sin recibir la bendición de Su Santidad.

El hombre llega a dominar la teoría del amor a la edad en que comienza ya a no dominar la práctica.

La belleza de la mujer fracasa en el codo.

Una mujer que tenga los ojos bonitos jamás consentirá en jugar a la "gallina ciega".

Los hijos no empiezan a querer a sus padres hasta pasados los treinta años.

La sinceridad la inventó uno que quería amargarle la vida al prójimo.

La luna está siempre tan pálida porque hace exclusivamente vida de noche.

El crepúsculo es un fracaso diario de la Naturaleza.

Uno de los espectáculos más divertidos es ver cómo se casan los demás.


(Jardiel Poncela, Enrique; Máximas, mínimas. 535 aforismos sobre temas que, por no ser de actualidad, están siempre de actualidad, Barcelona, Luis Miracle, 1937)