domingo, 9 de diciembre de 2012

Malas Notas 34

La muerte es la más inoportuna de las diosas.

Tal vez no sería tan terrible la muerte si al menos nos dejara asistir a nuestro entierro.

Uno de los inconvenientes de la muerte es que no te permite conocer el final del libro que estabas leyendo, ni el inicio del que ibas a empezar.

Es mi amigo aquel que no me gustaría asistir a su entierro y no me importaría que él asistiera al mío.

Primo Levi escribió una serie de narraciones sobre su experiencia en los campos de concentración con el título de Pretérito perfecto. Castilla del Pino, por su parte, tituló Pretérito imperfecto sus memorias que abarcan la guerra civil y la posguerra. Pero este tipo de recuerdos no pueden conjugarse como no sea con el Pretérito terrible.

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